Los laberintos son intrincados caminos que han sido utilizados durante siglos como herramienta para calmar la mente y encontrar la paz interior. Al utilizar un laberinto cómo meditación, te sumerges en el momento presente. Son una oportunidad para dejar atrás el estrés diario y conectar contigo mismo. Los laberintos no se tratan de perderse, sino de encontrarse. Son un recordatorio de que, aunque el camino puede parecer complicado, siempre hay una ruta clara hacia la serenidad.

Y para llevar esta experiencia a tu hogar, he creado un par de laberintos de cerámica que puedes recorrer con el dedo. Cada uno tiene un diseño y esmalte único y sus nombres están inspirados por mujeres artistas surrealistas.

Descubre la paz interior mientras encuentras el camino.

*El laberinto Claude tiene dos grietas y por eso el precio está reducido.

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